Investigación
Cooperación
SEMA
El estrés de las madres durante la estancia en las unidades neonatales debido a un nacimiento prematuro influye en la relación afectiva en el primer año de vida.
Estrés materno y relaciones afectivas en nacimientos prematuros.
Piñero Peñalver, J; Duñabeitia, J.; Navarrete Muñoz, E; Martínez Fuentes, M.T.; Ferrández Berenguer, M.J; Pérez-López, J.;Fernández-Rego, F.J.; Igual Blasco, A.; Candela Sempere, B.; Vargas Torcal, F.
Grupos colaboradores:
CINC de Nebrija; GIAT UMU; InTeo UMH
En los últimos años, los avances en materia de neonatología han propiciado una reducción importante de la mortalidad en los niños prematuros. Si bien es cierto, que esta circunstancia implica un riesgo mayor de morbilidad a medio, corto y largo plazo, ya que existe una relación inversamente proporcional en cuanto a las semanas de gestación en el nacimiento y el riesgo de presentar patologías en el desarrollo. En este punto, se hace constar que el niño prematuro no sólo presenta un riesgo por el simple hecho de serlo, sino que, además, presenta una mayor vulnerabilidad por su estancia, tras el nacimiento, en las unidades de neonatología. Por otro lado, la internalización hospitalaria de un neonato es una causa de estrés agudo en las madres, que lleva implícito tener que ir viendo cómo el hijo se va sometiendo a diferentes tratamientos rodeados de tecnología y tener que tomar decisiones críticas sobre el cuidado. Varios estudios centrados en describir las percepciones maternas tras la hospitalización de un neonato muestran que la madre tiende a sufrir cantidades elevadas de estrés y ansiedad enfocada al momento de abandonar el hospital, ya que se crea un miedo a no disponer de las habilidades necesarias para atender al neonato adecuadamente (Zhang, 2021). Las intervenciones centradas en dar soporte a los padres de bebés prematuros tienen numerosos resultados positivos; como reducir el estrés de los padres o fortalecer el vínculo durante el desarrollo, además de reducir la duración de la estancia en la unidad neonatal y el reingreso al hospital (Matricardi, 2013). Con base en los argumentos expuestos, el objetivo del presente proyecto es analizar el efecto que el entorno hospitalario puede ejercer en las primeras interacciones entre la madre (o figura de cuidado principal) y el/la niño/a.
Comité de Ética de la Investigación con
medicamentos del Hospital General Universitario de Elche, Número: código de registro PI 8/2023
Contacto: sema@fundacionsaludinfantil.org
CVFAT
Cuestionario breve sobre calidad de Vida Familiar en contexto de Atención Temprana (CVFAT).
Candela Sempere, B; Piñero Peñalver, J; Duñabeitia, J.
El nacimiento de un bebé es un cambio emocional, personal y social en todos los miembros de la unidad familiar. Cuando el/la niño/a es diagnosticado/a de una alteración en su desarrollo o del riesgo de padecerla, la dinámica familiar se puede ver alterada provocando en ocasiones un ambiente disfuncional que no beneficia al niño/a ni al entorno. Los sentimientos de culpa y negación, así como efectos disfuncionales como el aislamiento social o disrupción de roles, son habituales en los inicios del proceso de aceptación. La llegada de la familia a un centro de Atención Temprana encamina la intervención hacia el niño/a, familia y entorno, y al mismo tiempo moldea el ambiente del núcleo familiar. El libro Blanco de Atención Temprana (2000) define la Atención Temprana como el conjunto de intervenciones dirigidas a niños/as entre los 0-6 años, a la familia y al entorno. El objetivo general de esta línea de investigación pretende evaluar la calidad de vida familiar de los progenitores usuarios de un servicio de Atención Temprana.
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Validación de los cuestionarios OBI-Care y PSI
Validación de los cuestionarios OBI-Care y PSI para medir el equilibrio ocupacional e índice de estrés parental en cuidadores de niños y niñas prematuros.
IP: Cristina Ruiz,
Dirigen: Eva Navarrete (Grupo InTeO UMH) y Jessica Piñero (CIN FSI)
Cada vez son más los niños que nacen prematuros y que requieren de periodos de hospitalización en UCIN. Esto supone un cambio de rol, desequilibrio y estrés en los cuidadores informales, teniendo que dejar trabajos, pasar largos periodos en el hospital e incertidumbre ante el futuro y situación. Además, los niños prematuros tras el alta, suelen requerir de apoyos o estimulación en el desarrollo lo que requiere asistir a consultas y revisiones. Esto requiere cambios significativos en sus ocupaciones, sumado al estrés que se les genera a la familia ante la nueva situación. La falta de instrumentos de evaluación validados para dicha población nace este proyecto. Tiene la finalidad de validar los cuestionarios OBI-Care y PSI en cuidadores de niños/as nacidos prematuros, ya que existe la necesidad de contar con cuestionarios autoinformados que sean sensibles y ayuden a identificar las dificultades para poder presentar un servicio de atención y calidad a las familias.
