Beneficios de la hidroterapia en niños y niñas con Síndrome de Down

21 Mar Beneficios de la hidroterapia en niños y niñas con Síndrome de Down

Desde la Fundación Salud Infantil, más concretamente desde el programa de Estimulación Acuática, nos gustaría explicar algunos aspectos del trabajo que realizamos en el agua. Hoy hablaremos de los y las menores con Síndrome de Down y de los beneficios que aporta esta terapia para su desarrollo psicomotor y emocional.

La estimulación acuática es una manera de aplicar la hidroterapia de forma lúdica. Los y las menores aprenden jugando. Hay que subrayar la importancia de la constancia en este tipo de terapia ya que los resultados se van consiguiendo paulatinamente.

Es recomendable empezar en la primera infancia, cuando las niñas y los niños aún no saben nada. De esta manera se les ayuda a reforzar su autoestima y a valerse por sí mismos. Los movimientos que se consiguen en el agua son mucho más suaves, se realizan con menos esfuerzo y reafirman su tono muscular.

Los avances de la terapia se consiguen gracias a las propiedades que nos ofrece el agua, como la ingravidez, que permite disminuir la carga que soportan las articulaciones y ayuda a que los movimientos sean más amplios. Además, el agua facilita conocer el propio esquema corporal y la relajación muscular. Las inmersiones permiten trabajar el sistema respiratorio de forma específica. La densidad del agua proporciona una resistencia mayor que la del aire a la hora de ejecutar movimiento, por lo que se consigue un aumento del tono muscular, sin riesgo de lesiones. También es preciso destacar que, gracias a la temperatura del agua, se originan cambios que influyen en la regulación del sistema respiratorio, digestivo, circulatorio, cardíaco y renal. También es importante subrayar que los receptores del dolor están menos sensibles y que, por tanto, su percepción disminuye.

Varios estudios apoyan esta terapia para niños y niñas con Síndrome de Down. Concluyen que lo más importante son la autonomía y la independencia que el paciente consigue en el medio acuático en comparación con el terrestre. La mejora de la autoestima, el aumento de la calidad, la cantidad de movimientos y el aumento de la masa muscular, que consigue reducir la hipotonía, son los beneficios más significativos que se pueden alcanzar con la estimulación acuática.

Bibliografía:

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