04 Nov La Fundación Salud Infantil ofrece El Neurofeedback, una técnica novedosa
Actualmente existe un interés creciente en torno al Neurofeedback, una novedosa técnica que está entrando con mucha fuerza, principalmente, dentro del ámbito de tratamiento de algunos trastornos psicológicos.
“¿Qué es?” “¿Para qué sirve?” “¿Es efectivo?“ “¿Cómo funciona?” “¿Cómo se hace?” “¿Tiene efectos secundarios?” Y, sobre todo “¿en qué casos está recomendado?”
El Neurofeedback es una técnica de autorregulación por medio de biofeedback EEG (electroencefalograma), que permite que ciertos parámetros de la actividad eléctrica de la persona, recogida mediante electrodos situados en el cuero cabelludo, se presenten de forma visual, auditiva o táctil, con una tarea para que el sujeto modifique voluntariamente dichos parámetros en la dirección adecuada e indicada por el terapeuta, mejorando así la función cerebral.
Es un método no invasivo, no causa ningún dolor, ni precisa medicación. Además, llevado a cabo por un profesional cualificado y con experiencia no se observan efectos adversos. La Asociación Americana de Psicología lo considera una intervención basada en la evidencia científica.
¿Cómo se aplica el entrenamiento con neurofeedback?
Antes de iniciar el tratamiento es muy importante hacer un estudio personalizado de la persona para elaborar los protocolos de tratamiento, es decir, saber qué y cómo se va a trabajar. Para ello, hay que realizar una evaluación psicológica y neurológica completa y obtener un mapa cerebral o QEEG.
Una vez realizado el estudio y obtenido el protocolo personalizado, se procede al entrenamiento con Neurofeedback. Podríamos decir que, por primera vez y a través del Neurofeedback, se ha conseguido dar instrucciones al cerebro en su mismo lenguaje. Un ejemplo sería el equivalente a dar un espejo a un individuo que no sabe para qué sirve y que nunca ha visto su imagen reflejada. Al verse a sí mismo, puede modificar su aspecto y conducta basado en la información que obtiene con el espejo. Con el Neurofeedback, el cerebro se hace consciente de sus propias funciones cerebrales e introduce un elemento de control para mejorarlas.